El camino de la luz y la filosofía: Una conversación con Anca Vasiliu, filósofa de prestigio en Francia
Anca Vasiliu, una destacada filósofa con una rica carrera académica e investigadora en el campo de la filosofía antigua, es originaria de Bucarest. Estudió en el Instituto de Bellas Artes Nicolae Grigorescu y continuó su formación en universidades de Francia. Con un doctorado en filosofía de la Universidad Paris X Nanterre, bajo la dirección de Jean-Luc Marion, Anca Vasiliu ha tenido un impresionante recorrido académico, convirtiéndose en directora de investigación de alto nivel en el CNRS y profesora supervisora de doctorados en la Universidad Sorbona (Paris IV).
Es conocida por sus significativas contribuciones a la filosofía antigua, con obras como „Du diaphane. Image, milieu, lumiere dans la pensée antique et médiévale” (Vrin, 1997), „Eikôn. L’image dans le discours des trois Cappadociens” (PUF, 2010), „Dire et voir. La parole visible du Sophiste” (Vrin, 2008), „Image de soi dans l’antiquité tardive” (Vrin, 2012), „Divines techniques. Arts et langage homérique à el fin de l’Antiquité” (Classiques Garnier, 2016), „Penser Dieu. Noétique et métaphysique dans l’Antiquité tardive” (Vrin, 2018), „Montre l’âme. Lecture du Phèdre de Platon” (Sorbonne Université Presses, 2021). Además, es la directora científica de la revista internacional de filosofía antigua y medieval, „Chôra”, fundada en 2003. También coordinó, junto con Alexander Baumgarten, la traducción y adiciones al „Vocabularul european al filosofiilor” al rumano (Polirom, 2020), una notable contribución al patrimonio filosófico.
Anca Vasiliu ha sido galardonada con numerosos premios y distinciones, incluyendo el Gran Premio de Filosofía de la Academia Francesa por su obra completa en 2022. También es Doctora Honoris Causa de la Universidad Babeș-Bolyai de Cluj-Napoca y de la Universidad Estatal de Ioannina (Grecia). Con una carrera rica y variada, Anca Vasiliu es una figura destacada en el mundo de la filosofía contemporánea.
Dentro de la campaña de excelencia rumana fuera de las fronteras, „¡Apoyamos la excelencia!”, lanzada por Occidentul Românesc el 15 de enero de 2015, Anca Vasiliu fue premiada con el Trofeo de Excelencia Rumana en un prestigioso evento celebrado en noviembre de 2022 en Madrid.
Anca Vasiliu forma parte, junto con otras cuatro personalidades rumanas, del jurado del concurso „¡Apoyamos la excelencia!”, edición IV, 2023-2024, que ha tenido tres ediciones hasta la fecha, en el marco de la campaña de excelencia rumana fuera de las fronteras, lanzada por Occidentul Românesc el 15 de enero de 2015.
Este verano, con motivo de la selección de Timișoara como Capital Europea de la Cultura, la Universidad Politécnica de Timișoara organizó un evento cultural excepcional al que fue invitada Anca Vasiliu. El evento se llevó a cabo durante 10 noches consecutivas y consistió en un diálogo entre los 10 destacados rumanos invitados y la comunidad local. El conocido periodista Cătălin Ștefănescu de TVR1 moderó el evento. Estas reuniones tuvieron lugar en un entorno cultural y brindaron la oportunidad a estudiantes y residentes de Timișoara de dialogar con destacadas personalidades de la diáspora rumana. Después de la conclusión del evento, las discusiones y encuentros se transmitieron en una serie de programas emitidos por TVR1, cada viernes por la noche, presentando así durante varias semanas las historias y perspectivas de los 10 invitados.
¿Qué significaron para usted las distinciones y premios recibidos, especialmente el Gran Premio de Filosofía de la Academia Francesa por toda su obra?
He recibido con asombro y con el temor de que mi camino aún no haya concluido (me gusta pensar que no lo ha hecho), las distinciones y premios acumulados recientemente, con la preocupación de que lo que sigue podría no estar a la altura de las expectativas. Nunca he trabajado con la idea de recibir alguna recompensa o reconocimiento. Por el contrario, siempre he trabajado con la idea de retribuir lo mejor que pueda a aquellos que me han educado y han invertido su tiempo, conocimiento y confianza en mí. Quería demostrarles que no se equivocaron en la inversión que hicieron. Me gustaría seguir trabajando de manera que pueda agradecer de esta manera, incluso post mortem, a aquellos que me han brindado su apoyo, y a veces su admiración e incluso amistad. Por otro lado, considero los premios recibidos como un estímulo, no para mí, sino para la generación más joven de intelectuales que puede sentirse incómoda en el mundo actual, un mundo cada vez menos orientado hacia la educación, la cultura, el arte y el conocimiento.
El otoño pasado fue premiada con el Trofeo de la Excelencia en un evento en Madrid al que asistieron élites rumanas de tres continentes. ¿Qué significa para usted esta distinción otorgada por una organización sin fines de lucro, que edita desde hace 14 años la publicación Occidentul Românesc, una publicación independiente sin afiliaciones políticas o religiosas, dedicada a los rumanos fuera de las fronteras de Rumanía?
Fue un momento inesperado y especialmente emotivo para mí. Confieso que no conocía la existencia de esta organización ni de la publicación Occidentul Românesc. Al descubrirlas, acepté espontáneamente la invitación y participé asombrada en el evento, teniendo la oportunidad de descubrir de esta manera una comunidad rumana que no conocía: el rostro de los rumanos que viven en Occidente, trabaja y tienen logros notables en diversas áreas especializadas. Rumanos integrados en las sociedades „occidentales”, provenientes de los cuatro rincones del mundo y asumiendo con orgullo tanto su origen rumano como los éxitos en sus campos de especialización.
Nunca antes tuve la oportunidad de encontrarme con médicos, escritores, profesores, empresarios, periodistas, artistas plásticos, músicos, diplomáticos rumanos reunidos, en un ambiente relajado y natural, compartiendo sus experiencias extremadamente variadas y todos disfrutando de conocerse y sentirse bien con „compatriotas”. Aunque soy en gran medida solitaria, me sentí orgullosa de pertenecer a esta comunidad y de poder compartir mi experiencia con personas a las que conocía por primera y quizás única vez, pero con las que no me sentía ajena. En el fondo, la experiencia de cada uno de nosotros tiene un grado de similitud con la del otro, incluso si venimos de horizontes geográficos y disciplinarios diferentes. Creo que es una iniciativa notablemente saludable, humana y beneficiosa. Es un modelo de unidad más allá del determinismo de las fronteras y las opciones políticas; quizás sea un modelo de una sociedad futura que respete sus valores y fomente tanto la fraternidad como la libertad.
¿Cuáles son los proyectos o líneas de investigación en los que está involucrada actualmente y cuáles son sus expectativas y objetivos futuros?
Continúo en la dirección de investigación que mencioné anteriormente. El año pasado terminé un libro sobre la función demiúrgica del lenguaje, basándome en un estudio comparativo de dos diálogos platónicos, el Sofista y el Timeo. Esta función demiúrgica no significa que el lenguaje fabrique efectivamente el mundo objetivo, sino que es él quien construye la realidad de este, la realidad que la mente otorga o no a la existencia de un mundo objetivo. Platón, siguiendo a Parménides y Empédocles, establece así los cimientos de la primera metafísica, como se llamará más tarde la ciencia por excelencia de la filosofía. Este libro se publicará en la primavera de 2024 en PUF. Ahora estoy trabajando en otro estudio dedicado a la relación que la vista mantiene con la luz. Esta relación es para mí una parábola de la capacidad de la visión (que es una facultad mental) para crear un vínculo entre lo corporal e incorporal, dado que la luz para la cultura antigua y medieval no es un fenómeno físico. Al no disponer de instrumentos de medición de la luz sino solo de instrumentos de observación, la cultura antigua no tenía una teoría física de la luz, ya que esta no era ni materia ni energía ondulatoria, como en las ciencias modernas. El tema es, por supuesto, inmenso. Me acerco a él desde la manera en que Platón, Aristóteles y Plotino abordan el problema de la luz como condición de la visión, y esbozo en el epílogo dos ecos tardíos de esta problemática, en Dante y en Marsilio Ficino, retomando estudios más antiguos desde una perspectiva nueva. Espero poder publicar este nuevo libro a finales de 2025 o en 2026. También tengo otros proyectos en perspectiva, pero como están solo en la etapa de esbozo, prefiero no hablar de lo que aún no ha comenzado.
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