Piatra Neamt – La “Sinaia Moldava”
La “Sinaia Moldava”, la ciudad de Piatra Neamt, también conocida como la “perla moldava” por su rica arquitectura es un puente entre las regiones de Bucovina y Transilvania. La mayoría de los edificios significativos estuvieron auspiciados por obra de Esteban el Grande, el monarca que reinó entre el 1457 y 1504.
Capital del distrito de Neamt, el clima suave es uno de los hechos que anima a huir del frío invierno rumano y del abrasador calor del verano. En Piatra Neamt los veranos son cortos y suaves, y los inviernos no suelen ser nevados, precedidos por un otoño largo y agradable.
La fisonomía del asentamiento viene definida por el río Bistrita, así como otros tantos numerosos recursos hídricos que han posibilitado la aparición de una prometedora industria hidroeléctrica, proliferando centrales y presas, que han servido para controlar el caudal de los ríos que desbordados han generado numerosos desastres con las crecidas.
Que ver en Piatra Neamt
Uno de los atractivos de Piatra Neamt es subirse al teleférico, conocido como el Telegondola. Parte de la estación de tren y asciende hasta los 657 metros de los montes Cozla. Funciona de martes a domingo de 10:00 a 22:00 y tiene descuentos para grupos de más de veinte personas, estudiante y menores de 14 años. El viaje en una de las 22 góndolas dura unos 6 minutos a lo largo de unos 2 km que nos ofrece una foto aérea de Piatra Neamt.
Son varios los museos con interés de la ciudad, empezando por el museo Historia Neolítica, en Stefan cel Mare nr. 3. La región fue habitada desde el neolítico, existiendo importantes yacimientos que lo atestiguan, como los de la cultura Cucuteni. Abierto en 2005 en un edificio obra del arquitecto Carol Zani en 1928-30, y decorado por el escultor Vincenzo Puschiasis.
El segundo museo de la ciudad es el etnográfico, con exposiciones de arte tradicional y folclore local, con trajes y piezas del día a día de los campesinos del valle de Bistrita de los últimos siglos. El tercero que destacamos es el de Ciencias Naturales que además de secciones botánicas, paleontológicas y zoológicas, tiene en los peces fosilizados su centro de atención.
Los otros museos son el de Historia que tiene una muestra de colecciones arqueológicas de la edad de Bronce y Geto-Dacianas; y el museo de Arte que cuenta con pinturas, grabados y esculturas de artistas locales como Ion Tuculescu, Nicolae Tonitza, Corneliu Baba o Lascar Vorel.
En torno a la plaza Libertatii se concentran gran parte de los monumentos destacados de Piatra Neamt. Uno de los principales es la Corte Principesca, cuyo elemento principal es la Iglesia de San Juan (Biserica SF Ioan), de estilo moldavo con elementos bizantinos y consagrada en época de Esteban el Grande. Los muros exteriores policromados son muy vistosos. En la misma plaza la Torre del reloj de 1499 hacia la labor de punto de observación de la ciudad.
Merecen atención también la Sinagoga de madera de 1766, la ciudadela dacia de Bâtca Doamnei en la colina de la parte derecha del río Bistrita, o la Iglesia de la transfiguración del siglo XVI con sus vistosos ventanales decorados con motivos geométricos.
Para terminar la visita por Piatra Neamt podemos visitar las “casas nobles” de Lalu y Paharnicului, residencias de lujo de principios del siglo XX. Actualmente han pasado a ser de uso público o en el caso de a segunda a un restaurante y unos grandes almacenes.
En las afueras de Piatra Neamt, a unos 7 km en coche siguiendo la carretera 15 hacia el oeste accedemos al Monasterio de Bistrita, fundado en 1407 por Alexandru cel Bun en época de los voivodatos. Un siglo y medio después el príncipe Alexandru Lapusneanu lo completó, convirtiéndose en un centro religioso y cultural de primer orden.
Si hacemos una ruta por la región nos podemos apuntar la visita a los monasterios de Agapia, en un entorno pintoresco y rodeado de una naturaleza muy frondosa; El de Varatac, el de Secu o el de Sihastria. Especial mención hay que hacer para el monasterio de Neamt.
La cercanía con Bicaz nos brinda la posibilidad de llevar a cabo una ruta por las impresionantes gargantas de Bicaz, horadadas por la erosión del agua, siguiendo una carretera panorámica que nos llevará al Lacu Rossu, un lago alpino donde parar disfrutar de la naturaleza. Al norte de Pietra Neamt está la posibilidad de disfrutar de la ruta por Bucovina, conociendo los monasterios pintados Patrimonio de la Humanidad.
Zoe Stoleru Martí
Ingeniero geógrafo – Valencia