Rumanos por la Costa Blanca
Rumanos por la Costa Blanca
Conocida mundialmente por la música y el baile flamenco, las corridas de toros y sus maravillosas playas, España tiene muchísimo más que ofrecer a sus visitantes. Ha sido durante siglos y sigue siéndolo, uno de los más importantes centros culturales europeos. Sus ciudades combinan la arquitectura antigua con la moderna y cada región es distinta por sus características, su clima y su personalidad. Es un país que hay que descubrir. Su belleza y su posición geográfica privilegiada, entre Europa y África, hacen de España, desde la antigüedad, una encrucijada, un punto de encuentro entre el norte y el sur. La diversidad cultural, la mezcla de civilizaciones que han encontrado aquí su hogar, dejan detrás una cultura original y única, un admirable experimento.
Costa Blanca
La Costa Blanca se merece plenamente su nombre: playas de blanca arena, con muchos días de sol, naranjos y almendros que, en primavera, inundan con sus flores y sus aromas esta maravillosa zona. Una serie de municipios (Alicante, Benidorm, Alfàz del Pí, Altea, Calpe, Benissa, Moraira, Teulada, Jávea etc.) están todos los años a la espera de sus visitantes, ofreciéndoles alojamiento tanto en hoteles, como en coquetas casas, íntimas y bien cuidadas.
Rumanos en la Costa Blanca
Entre los inmigrantes rumanos asentados en la Costa Blanca, he conocido a Firuţa y Marinel Ţentea, originarios de la provincia de Cluj. Salieron de Rumania en el inverno del 2001, con visado de turista de una semana, vía Austria, con destino final Altea, provincia Alicante, donde residía un hermano de Marinel Țentea.
En aquellos momentos, asumiendo todos los riesgos de la emigración, dejan al cuidado de la familia dos hijos menores, de dos años y medio y respectivamente seis años y medio. Llegaron a España al principio del 2001, con la decisión de partir desde cero, de cambiar sus vidas y de ayudar a sus familias, que se quedaron en Rumania.
El periodo siguiente ha sido un gran reto para los Țentea. Si Firuța ya tenía un trabajo en un restaurante, Marinel consiguió trabajar esporádicamente en la construcción. Un oficio que desconocía y que no lo había realizado nunca en Rumania.
Pero el deseo de éxito, la valentía y la esperanza, el respeto mutuo, la comprensión y el amor, el hecho que no han estado nunca separados, ayuda a los dos superar una de las épocas más difíciles de sus vidas. Hasta que, en Semana Santa, la jefa de su esposa le propone a Marinel que les eche una mano en el restaurante durante seis días. Para la familia Țentea, estos días representaron el momento de inicio de su éxito en el país de Cervantes. Con una experiencia de más de 20 años en la actividad hostelera de Cluj, Marinel impresiona a los propietarios del restaurante con su profesionalidad y por lo tanto, al finalizar los seis días, le proponen seguir trabajar en el restaurante, haciéndole un contrato de trabajo. Los trámites para conseguir el permiso de residencia y de trabajo constituyen el primer paso hacia la legalidad en España.
Tras un breve periodo en el restaurante que se convirtió en el trampolín hacia el éxito de la familia Țentea, otras oportunidades llegaron, un restaurante más grande en Altea, luego trabajaron en un hotel de cinco estrellas en Altea Hills. Al mismo tiempo, se apuntaron a clases de castellano e inglés, trajeron a los niños a España, se especializaron en la cocina española y la internacional, trabajando sin cesar, integrándose en la sociedad y sobrepasando todas las barreras de la inmigración, hasta que, tras unos años, decidieron abrir su propio negocio, un pequeño restaurante.
Debido al esmero en el trabajo y a su profesionalidad, al trabajo con los clientes, en poco tiempo el restaurante se quedó pequeño para la clientela que tenían, y por lo tanto empezaron a buscar un espacio más amplio, que se amoldaba mejor a sus deseos. No consiguieron encontrar en Altea lo que estaban buscando, pero la suerte hizo que descubrieron el sitio ideal en L’Albir, el núcleo de población más habitado de L’Alfàz del Pí, situado entre Benidorm y Altea. Y así salió en el mapa de Albir, en el año 2007, el restaurante “Transilvania” (Camí Vell d’Altea, 36), que en la actualidad se encuentra en top 13 de los 99 restaurantes internacionales de la zona.
Después del restaurante, abrieron una tienda de alimentación, de productos típicos rumanos, en Alicante. En todo este tiempo Firuța se encargaba del restaurante, mientras Marinel viajaba diariamente hasta Alicante. Por la tarde, al volver a Albir, echaba una mano en el restaurante, junto a su esposa.
Han sido duros años para la familia Țentea, con mucho trabajo y mucha responsabilidad, pero el amor, el respeto y la confianza los mantuvieron unidos, junto a los niños, y consiguieron alcanzar la meta que se propusieron, llegar hasta la cima, en una profesión que siempre han querido y respetado.
Los dos hijos son el orgullo de la familia. El mayor, Cătălin, es estudiante en una universidad de economía, en Alicante, y el pequeño – Paul -, está estudiando en el segundo de bachillerato. Dos jóvenes que nunca han creado problemas a sus padres, muy bien integrados en el colectivo y en la sociedad, educados, sencillos…
En enero 2015, Firuța y Marinel Țentea cedieron la tienda de Alicante a sus empleados y decidieron abrir una cafetería, a dos manzanas de distancia del restaurante Transilvania, de cuyo funcionamiento se encarga Marinel.
En este momento tienen 18 empleados, solo rumanos, y los camareros hablan fluentemente español e inglés. La clientela de los dos establecimientos está formada en mayoría por noruegos (en Alfaz del Pi y Albir viven más de 6.000 noruegos), británicos, holandeses, suecos, belgas y alemanes. Los rumanos les visitan principalmente los fines de semana o con motivo de celebraciones típicas: bodas, bautizos, aniversarios.
El restaurante “Transilvania” – Un local predilecto para… príncipes y princesas
Cuando llegas al restaurante de la familia Țentea, en un instante te das cuenta de que es un lugar donde puedes disfrutar de los más exquisitos preparados culinarios. Las mesas preparadas con manteles y servilletas de tela, impecables, relucientes, te ofrecen la seguridad de poder disfrutar de una cocina perfecta, bajo el punto de vista de la higiene y la limpieza.
El personal, muy bien preparado, con un uniforme especifico, te ofrece servicios de calidad, respeto y amabilidad. Por eso muchas personalidades han escogido este local para disfrutar de una buena comida o cena. El restaurante Transilvania es un templo del buen gusto, donde los chefs preparan unos menús especiales y variados con especialidades rumanas e internacionales.
Combinando la elegancia con el refinamiento, el arte culinario con los servicios de alta calidad ofrecidos por un personal especialmente cualificado, el restaurante Transilvania se convierte en un lugar inolvidable para sus visitantes. La fama de las prestaciones de alta calidad, la preparación de los platos y la amabilidad de los trabajadores son los puntos fuertes que convierten el restaurante Transilvania en uno de los mejores restaurantes de la Costa Blanca.
SpazioCaffè Manuel en Albir
En mayo de este año, Firuța y Marinel Țentea abrieron el otro local, situ en la Calle Vivaldi nº 11 de Albir: SpazioCaffe Manuel. Una cafetería tradicional italiana, con un formato de éxito seguro. Un local de moda, con un acento cosmopolita, un lugar para la relajación, un espacio que se adapta a la necesidad del consumidor, donde todo está relacionado con el café y con sus mejores acompañantes posibles. Una variedad de galletas y bizcochos, pasteles, helados, ensaladas, especialidades de café y té, son algunos de los productos elegantes y sofisticados que atraen a los clientes a SpazioCaffe Manuel, de Albir, el local del cual Marinel Țentea se siente muy orgulloso, por haberle creado según sus sueños y deseos. A la inauguración participaron autoridades locales, invitados de marca de las comunidades norte europeas afincadas en la Costa Blanca. El alcalde del municipio de l’Alfaz del Pi mandó un inmenso ramo de flores y una carta de felicitación, sin poder acudir, debido a la campaña electoral que se realizaba en aquellas fechas.
Planes de futuro
Desde la salida de Rumania de los Țentea ya han pasado 14 años. Un breve periodo de tiempo en el cual Firuța y Marinel han conseguido trabajando duro, con renuncias y sacrificios realizar lo que en Rumania a lo mejor les hubiera llevado 50 años… Dos rumanos entre millones de inmigrantes en Europa que se han integrado en el país de acogida, que les ha ofrecido la oportunidad de sus vidas.
Rumanos entre rumanos que han conseguido imponerse por su profesionalidad, honradez, rigor y talento dentro de la comunidad. Una familia definida, a pesar de haber alcanzado un nivel material envidiable, por la modestia y el sentido común.
Debido a que los hijos de la familia Țentea están construyendo su futuro en España, de momento no prevén un retorno a Rumania. Firuța y Marinel desean que, dentro de unos diez años, los jóvenes cojan las riendas del negocio, para que ellos vivan tranquilos, ya jubilados, pasando los inviernos en España y los veranos…en Rumania.
Un material realizado y editado por Kasandra Kalmann Năsăudean
Traducción: M. Apostol
Nota del Editor:
Firuţa y Marinel Ţentea han sido nominados para la Campaña Gala de Excelencia, que se celebrará en el mes noviembre de este año en un lugar exótico de Costa Blanca / España.