Quién es Gabriela Căluțiu Sonnenberg
Cuando la educación y el estudio van entrelazandose con el talento
Gabriela Căluțiu Sonnenberg nació y creció en la villa de Tălmaciu, cerca de Sibiu, en una familia de intelectuales, maestros de lengua y literatura rumana. Como cadete de la familia – nacida a cinco años y medio después de su hermana mayor – crece rodeada del cariño y de la atención de sus parientes, siempre protegida y animada a fin de fomentar su talento.
Desde la primera infancia se familiariza con la diversidad cultural y lingüística que caracteriza aquella zona de la Transilvania, habitada por rumanos, alemanes, húngaros y gitanos, pero también por personas refugiadas de Besarabia, después de la Segunda Guerra Mundial y por los descendentes de algunas familias de empresarios italianos inmigrados al principio del siglo XX.
En este contexto aprende con facilidad el alemán y el rumano cómo idiomas de enseñanza escolar, pero también el francés y el inglés, lenguas extranjeras que sigue estudiando a lo largo de su educación secundaria y, más tarde, de la universitaria. Después de graduar de la escuela primaria en alemán, sigue la secundaria en rumano, ambas con excelentes resultados. Bajo la atenta supervisión de sus padres, completa los estudios del colegio con clases de enseñanza particular de música (guitarra, flauta) y con actividades deportivas diversas (tenis, natación, ballet, patinaje, senderismo).
A partir de la edad de 14 años, después de haber aprobado el examen de ingreso al Liceo Gheorghe Lazăr – el más prestigioso colegio de Sibiu – en la especialidad de matemáticas y física, consigue los concimientos y la base sólida de una educación teórica fundamental tanto en el campo de las ciencias, así como de la área de las disciplinas humanistas.
Pasa allí el bachillerato, también con resultados destacados, y se decide para el estudio académico en la capital del país, a Bucharest, en una especialidad prestigiosa de la Academia de Estudios Económicos, la Economia de los Servicios de Alimentación Publico y Turismo. A pesar de la enorme competencia en los exámenes de admisión para ocupar los escasos 30 puestos de estudio repartidos a esta especialidad, consigue aprobar los exámenes de admisión en 1987 como candidato en segundo plazo admitido a nivel del país entero.
Mientras estudia a la Universidad – dónde empieza, entre otras disciplinas, el estudio sistemático de la lengua española – los cambios políticos y la caída del comunismo se precipitan. Cómo estudiante, participa de manera activa en el proceso de democratización del país y a las demonstraciones pacifistas que empiezan en diciembre 1989. En 1992, cuando finaliza sus estudios, se encuentra en un país completamente en cambio,en una constelación política y económica sin precedencia en Rumanía, marcada por incertitud y imprevisto. Debido a sus resultados excelentes durante el período de estudios se hace remarcada entre los profesores de la Universidad y ellos la designan para quedar como aprendiz en la enseñanza económica superiora. Trabaja en los próximos años cómo docente a la Academia de Estudios Económicos de Bucharest, empezando los estudios de doctor, pero también como editora de Economía Mundial para la revista económica más conocida en la Rumanía de aquellos tiempos, la Tribuna Economică (periódico mensual que alcanzaba en los año ´90 una circulación de 30.000 ejemplares imprimidos).
Colabora con universidades privadas de Bucharest y acumula experiencia practica trabajando como empresaria asociada en diversas empresas comerciales, turísticas y informáticas; además sigue sus estudios, colaborando en Austria durante varios semestres con la Facultad Económica de Viena y otras de Alemania, donde efectúa cursos de formación y intercambios académicos, obteniendo al final de sus estudios el título de doctor en ciencias económicas de la ASE-Bucharest.
Participa en actividades humanitarias, fundando asociaciones nonguvernamentales de estudiantes dedicadas a la ayuda de los afectados por las atrocidades del régimen dictatorial socialista en Rumanía. También participa desde la central nacional de compras al implementar el negocio liberalizado en el mercado del país, siendo una de las primeras personas que han facilitado el ingreso en Rumanía de la empresa multinacional METRO ROM-Invest.
Después de casarse con su novio alemán, adopta la nacionalidad de su esposo y se establece en 1998 junto con su familia en España, donde vive hasta el momento actual, trabajando como traductora, intérprete (rumano, alemán, español, ingles, francés) y periodista para varias revistas y periódicos de lengua rumana, tanto en la diáspora, así cómo en Rumanía.
Sus obras enfocan temas relacionadas a la experiencia de vida de la emigración; descripciones de las atracciones turísticas de los países extranjeros; el impacto de las idiomas sobre la creación literaria (la lengua de expresión, ¿freno o motor de la inspiración?); demarcación y superposición de la filosofía y las ciencias exactas, confluencias interdisciplinarias; la vida de cada día y las diferencias de percepción debidas al filtro cultural de las naciones distintas; adaptación y multiculturalismo y cómo viene reflejada en el plan individual, personal; la identidad y homogeneidad cultural; la globalización del acceso a la información por el internet y su compatibilidad con las nuevas formas de comunicación (metalenguaje).
Desde Toronto, Canadá, la escritora Elena Buică describe el talento de Gabriela en los siguientes términos: „Las obras escritas por Gabriela Căluţiu Sonnenberg atraen en profundidades,aunque parecen jugando, pero es un juego esmerado, que esconde un tejido de significados entrelazados. Al leer sientes como se enriquece tu alma y se ilumina tu mente, dado que respiran decencia, sentido común y armonía. Son textos que la definen y si me tocaría escoger una sola palabra para caracterizar sus obras – cómo una marca sellada – yo elegía sin embargo la palabra ESPIRITUALIDAD“.